El número de cirugías se reduce
Gracias a implantes dentales cortos y estrechos
Los implantes dentales o las prótesis dentales son la solución idónea para la sustitución permanente de los dientes. En la renovación dental mediante un implante, es vital colocar un tornillo de titanio en el hueso y, sobre éste, una corona de cerámica o de resina, en función de las necesidades del paciente.
La evolución en la investigación de implantes dentales a lo largo de los años, ha permitido conseguir resultados dentales más estéticos y funcionales. Gracias a la inyección de un tornillo de titanio, reconocido por el organismo como parte de sí mismo, el hueso crece rápidamente alrededor de él, garantizando una unión definitiva e impecable.
Los dentistas suelen recomendar los implantes dentales, siendo una solución dental estética y fiable. Además, la implantología dental posee diversas ventajas respecto los tratamientos tradicionales, como son las coronas, los puentes y las prótesis removibles.
Implantes dentales barcelona es tu web de confianza.
Licenciado en Odontología, Universitat Internacional de Catalunya (UIC)
Doctor en Odontología, Universitat Internacional de Catalunya (UIC)
Certificado en Periodoncia e Implantes, Tufts University, Boston, USA Diplomate, American Board of Periodontology
Jefe del Departamento de Periodoncia y Director del Master de Periodoncia e Implantes, Universitat Internacional de Catalunya (UIC) – Acreditado por la Federación Europea de Periodoncia (EFP)
Secretario de la Sociedad Española de Periodoncia y Osteointegración (SEPA)
Revisor revistas internacionales (JCR) de Periodoncia e Implantes.
Director revista Periodoncia & Restauración (IJPRD versión española)
Autor de más de 35 artículos científicos internacionales en Periodoncia e Implantes.
Conferenciante nacional e internacional en Periodoncia e Implantes
Gracias a implantes dentales cortos y estrechos
Recurriendo a dientes inmediatos o definitivos, a partir de 6 semanas
Con un programa de mantenimiento personalizado
Los implantes dentales parecen, se sienten y funcionan como si de dientes naturales se tratase
Los dientes contiguos no son dañados para servir de apoyo a la nueva prótesis
Colocar implantes directamente en el hueso impide la reducción ósea que se produce tras la pérdida de piezas dentales
Si bien se trata de un desembolso económico considerable le pedimos al paciente que se pregunte tres cuestiones de vital importancia antes de elegir el profesional o dentista especialista que le colocará los implantes dentales:
¿Quién me realizará la cirugía?
A continuación puede observar el CV del Dr. José Nart, referente en España y Europa en implantes dentales:
¿Qué material o implante me colocarán?
El Dr. José Nart y su equipo depositan la confianza en la primera marca mundial de implantes, la suiza Straumann, cuyos estudios de investigación más recientes han concluido que es la mejor marca de implantes del mundo (Journal Dental Research). El éxito anual del Dr. Nart es del 98% y más meritorio resulta aún si entendemos que como especialista trata casos complejos y re tratamientos de otros dentistas.
¿Dónde me colocarán los implantes?
Nart Clínica Dental es una clínica consolidada entre las mejores de España, perteneciente al grupo Best Quality Dental Centers, y dispone de toda la tecnología más reciente y moderna para su atención. Difícilmente se encontrará mejor atendido. Puede revisar los índices de atención y opiniones que expresan nuestros pacientes en www.nartclinicadental.com
En Nart Clínica Dental somos especialistas en implantología. Disponemos de un equipo altamente cualificado y de los mejores materiales, como los implantes dentales Straumann. Ofrecemos un servicio basado en la prevención, diagnóstico y tratamiento personalizado, además de una financiación a medida para nuestros pacientes para que nunca dejen de sonreír.
¿Cuánto cuestan los implantes dentales?
Existen diferentes clínicas dentales que ofrecen un servicio de implantología a sus pacientes. Un factor a considerar en la elección de una clínica y la otra es el precio. Un implante dental en Barcelona supone una inversión en calidad y garantía durante 10 años donde el precio medio de los implantes dentales suele oscilar entre los 750 € y los 950 €.
Más concretamente, hay clínicas que ofrecen un servicio de implantología desde 222 euros o desde 590 euros. Del mismo modo que las clínicas ofrecen la opción de financiamiento, ponen a disposición del público promociones. Sin embargo, dejando las promociones a un lado, el precio que supone esta solución definitiva dental, es mayor. En otros casos los implantes dentales suponen un desembolso de 790 €, 850 € o incluso 1.490 €.
La prevención y el diagnóstico precoz son las mejores formas de evitar futuras complicaciones y mantener una correcta salud bucal.
Nuestro equipo profesional realiza un extenso diagnóstico para poder determinar las causas del problema y la solución más eficaz.
Te ofrecemos unasolución completamente personalizada en función de tus necesidades. Nos importas tú y tu salud bucal.
Nart Clínica Dental es una de las clínicas más punteras de toda Barcelona en Implantología. En nuestras instalaciones tenemos el equipo más puntero en implantes dentales actualmente, nuestros dentistas en Barcelona son profesionales reconocidos en cada una de sus especialidades. No sólo contamos con los últimos avances sino que también poseemos de todas las comodidades para nuestros clientes, como por ejemplo nuestro parking.
Nuestro especialista: Dr. José Nart Molina, especialista en periodoncia e implantes. Para más información sobre implantes dentales, visita la web de la clínica dental.
A todos los pacientes que nos piden implantes dentales, siempre seguimos la misma metodología. Se analiza previamente la situación para, posteriormente, realizar una exploración adecuada y emplear los métodos diagnósticos convenientes. Finalmente, se inserta la prótesis dental, cubriendo el implante con encía, si se trata de una regeneración ósea, o colocando el diente provisional en el mismo momento del implante. Este procedimiento se conoce como Dientes inmediatos o Dientes en un día ya que los implantes dentales pueden ser puestos en un sólo día.
Si no se ha colocado el diente el mismo día del implante dental, esperar el tiempo necesario, aproximadamente 3 meses, es crucial para garantizar la integración ósea de la prótesis. A continuación, se coloca un pilar de impresión. Se realiza una impresión del pilar colocado, obteniendo un modelo final sobre el cual se compone la corona perfectamente acoplada al pilar. Los modelos 3D han mejorado mucho las técnicas de implantes dentales.
Actualmente, cuando la ocasión lo permite, dependiendo de la cantidad y calidad del hueso y la zona a estructurar, se puede llevar a cabo la colocación de los implantes dentales y el diente sobre él el mismo día de la cirugía. Esta gran aportación técnica, conocida como “Dientes en un solo día”, ha otorgado una mayor comodidad a los pacientes.
Los implantes dentales pueden sustituir un solo diente, algunos de ellos o todos. Gracias a las técnicas de regeneración ósea existentes (elevación del seno maxilar, aumento del reborde alveolar), los implantes dentales que se colocan tienen un porcentaje de éxito muy elevado, generalmente.
Actualmente el éxito de los implantes dentales es extraordinario. Su uso durante décadas en la práctica clínica han validado su efectividad en el reemplazo de dientes faltantes. Los implantes dentales modernos se utilizan desde 1970 siendo mejorados desde entonces pero siempre sobre la misma idea. Los implantes dentales se han usado desde que el hombre utiliza la tecnología. Ya desde hace cientos y miles de años se reconocía el beneficio del reemplazamiento de dientes por diferentes tipos de implantes.
Los primeros intentos de implantes dentales que se han descubierto pertenecen a la civilización Maya y datan de los años 600. Los arqueólogos han recuperado cráneos en los que los dientes habían sido sustituidos por materiales como piedras afiladas o conchas. A pesar de los métodos y materiales primitivos empleados, algunos de estos primeros implantes dentales se fusionaban con el hueso.
El descubrimiento de la osteointegración
La osteointegración consiste en el proceso por el cual el tejido vivo del hueso y un material extraño se fusionan para formar una estructura continua. Como sucede muchas veces en los descubrimientos científicos, el descubrimiento de lo que era la osteointegración fue por casualidad. En 1952, un cirujano ortopédico sueco que se llamaba Per-Ingvar Branemark, estaba llevando a cabo un experimento para observar el proceso de cicatrización ósea. Para poder ver de manera microscópica la médula ósea en el proceso de regeneración, insertó un cilindro de titanio en la pata de un conejo. Una vez hubo finalizado su experimento, quiso retirar el trozo de titanio implantado para utilizarlo en futuros estudios pero no pudo extraerlo debido a que se había formado hueso en contacto con el material. Denominó a este proceso “osteointegración” después de ver como el tejido óseo quedaba integrado con el material. Esta es la base de los implantes dentales.
Branemark comenzó a trabajar sobre su nuevo descubrimiento en los campos de ortopedia y cirugía plástica. Se dio cuenta de que existían posibles aplicaciones en prótesis orales, de articulaciones y extremidades. Fue en 1965 cuando colocaron por primera vez un implante moderno en un ser humano.
Años 80
En 1982, Branemark presentó en una conferencia en Toronto los resultados de un estudio que había llevado a cabo durante 15 años y poco después, se les enseñó a investigadores de Estados Unidos los métodos de Branemark usados en Suecia con implantes dentales.
Progresos recientes durante el último siglo se han focalizado en los materiales y técnicas para mejorar la calidad y anclaje de los implantes dentales. A partir de los años 1980, se llevan a cabo importantes mejoras en las restauraciones estéticas en la implantología dental.
En los años 1800, Znamesky, Bonewell y R.E. Payne dieron reportajes de implantes dentales de materiales aloplásticos como el oro, porcelana, butapercha, irridium y plástico. Payne describió la implantación de una cápsula de plata sobre la cual se colocaría una corona dental posteriormente.
En 1937, Adams patentó un implante cilíndrico con el ápice redondeado y la parte cervical pulida. Fue colocado en el hueso maxilar con un tornillo de tapa y cubierto por encía para favorecer la integración antes de colocar la corona.
A partir de los años 1980, ya empiezan a aparecer los primeros implantes dentales modernos con un diseño cilíndrico semejante a la raíz de un diente natural. Posteriormente, los estudios de Branemark sobre el principio de la integración ósea evidenciaron la capacidad del titanio por unirse al tejido óseo. Hoy en día hay una inclinación hacia los materiales que reducen el tiempo de osteointegración gracias a superficies más activas. Anteriormente, se colocaba la prótesis tras 48 horas de la colocación del implante y actualmente se está optando por regresar a donde se empezó casi 30 años atrás, colocando la prótesis directamente sobre el implante sin esperar los tiempos de osteointegración establecidos. Se ha pasado de un principio de osteointegración donde se esperaba 3 meses en mandíbula y 6 meses en maxilar a un tratamiento de dos etapas y más recientemente a tratamientos de una sola fase. Hoy en día los implantes dentales están tratados para conseguir reducir el tiempo de integración y mejorar la calidad de la unión con el tejido óseo.
Tiempos de integración
Podemos dividir la osteointegración en tres fases diferentes desde la colocación del implante. Tradicionalmente estos han sido los tiempos: en primer lugar desde la colocación de los implantes dentales hasta la cuarta o sexta semana, hay formación del hueso reticular. Durante el segundo mes, hay una adaptación de la masa ósea a la carga y a partir del tercer mes hay una adaptación a la carga de la estructura ósea. Durante las tres o cuatro primeras semanas, no encontramos signos de osteointegración y es a partir de los tres meses que ya se ha producido el contacto entre el hueso y el implante dental.
Esto ofrece una resistencia a la tracción que irá aumentando con el tiempo ya que el implante se fija rígidamente en el hueso. Actualmente y debido a las nuevas superficies de los implantes dentales, estos tiempos se han acortado permitiendo la osteointegración a las 6-8 semanas o incluso a las 3-4 semanas para algunas superficies más específicas (SLActive). Para colocar la prótesis es importante tener en cuenta la estabilidad del implante y la osteointegración ya que someter el implante a fuerzas demasiado temprano podría suponer su pérdida.
Existen una serie de factores que hay que controlar para asegurar una buena osteointegración de los implantes dentales a parte de los tiempos ya comentados. La biocompatibilidad, el diseño y las condiciones de la superficie del implante, por ejemplo, son factores esenciales a tener en cuenta. También son importantes el lecho del hueso, las técnicas quirúrgicas de inserción utilizadas y las condiciones de carga protésica que se aplican posteriormente en los implantes dentales.
Diseños actuales de implantes dentales
Debido a razones clínicas, científicas y comerciales, el diseño de los implantes dentales está en continua modificación. Se modifica continuamente el diseño o macrogeometría de los implantes dentales con el objetivo de mejorar nuevos procedimientos clínicos y adaptarse por ejemplo en situaciones de mala densidad ósea. Además también se quiere conseguir una imagen de marca que se diferencie de las demás por un interés meramente comercial.
Se han ido descartando implantes dentales intraóseos por su diseño como los implantes transmandibulares, por su dificultad técnica y las complicaciones postoperatorias que podía ocasionar.
Actualmente, la opinión general es que los implantes dentales que ofrecen mejores resultados son aquellos que tienen una matriz roscada en forma de raíz dental. A partir de la modificación de las propiedades biológicas y biomecánicas se obtienen nuevas modificaciones del diseño inicial roscado. La elección del implante adecuado es fundamental para obtener resultados satisfactorios.
Existen diferentes factores que aumentan la probabilidad de conseguir una buena estabilidad primaria tras la colocación del implante. La estabilidad primaria debe ser suficiente para resistir micromovimientos hasta que se haya conseguido la estabilidad secundaria. La osteointegración podría verse afectada si existe un exceso de micromovimientos durante la estabilidad primaria. Un sistema de implantes cónico, por ejemplo, favorecerá una buena estabilidad. Es esencial que el contacto entre el implante y el hueso sea el mayor posible para conseguir un alto grado de contacto inicial hueso-implante. Además, se incluyen diseños macrogeométricos que también mejoran la estabilidad primaria como podrían ser los pasos de rosca más grandes o roscas altas y delgadas para asegurar una buena sujeción a largo plazo.
Una de las características que se aplican hoy en día en los implantes dentales modernos es la rugosidad superficial del implante que favorece la osteointegración. La presencia de rugosidades en la superficie del implante aumenta la superficie de contacto con el hueso favoreciendo así al resistencia del área de contacto.
La influencia de la geometría de la unión pilar-implante sobre la anchura biológica también es muy importante para el mantenimiento a largo plazo de los implantes dentales. Los tejidos blandos tienen tendencia a rodear cualquier objeto que sobresalga del hueso hacia el espacio intraoral constituyendo una barrera de protección para el hueso contra las bacterias que se encuentran en la boca. En el caso de que los tejidos blandos sean insuficientes, puede haber una reabsorción ósea hasta restablecerse la anchura biológica adecuada. El diseño del implante también puede influir en la anchura biológica. Los implantes con cambio de plataforma son aquellos implantes en los que se utilizan pilares con menos diámetro que el propio implante. De este modo se influye sobre la anchura biológica y se ha comprobado que la reabsorción del hueso crestal es menor.
Otro factor que depende del diseño del implante y puede afectar en los resultados estéticos y funcionales inmediatos y a largo plazo es el diseño de la conexión del sistema de implantes. Un buen diseño de conexión debe ser fácil de usar, flexible, resistente, estable, presentar un buen ajuste y debe ser preciso.
La comunidad de implantólogos va adoptando nuevas tecnologías de restauración como son las tecnologías digitales aumentando así las fuentes de error. La selección de una conexión con una posición constante de asentamiento podría contribuir a garantizar el éxito de esta revolución digital.
El diseño de los implantes dentales influye de manera significativa sobre los factores necesarios para obtener unos buenos resultados en la estética y funcionalidad del implante. De esta manera cada vez más se consigue que el paciente mantenga a largo plazo los implantes dentales.
Para la colocación de los implantes dentales se requieren una o dos fases quirúrgicas en las que se preparará el lecho óseo y se colocarán los implantes.
En el caso de realizar dos etapas quirúrgicas, en la primera se lleva a cabo la colocación del implante que quedará totalmente recubierto por encía. Pasadas unas semanas, en la segunda etapa quirúrgica, se realizará una incisión en la encía que recubre el implante para comprobar que todo va bien y se colocará un pilar que estará en contacto con el medio bucal. Este pilar servirá de unión con la futura prótesis.
Actualmente, cada vez más se colocan implantes con una sola fase quirúrgica. En estos casos, en la misma sesión se coloca el implante y un pilar transepitelial o de cicatrización que estará en contacto con el medio bucal. En algunos casos, se podría incluso colocar la prótesis el mismo día que se coloca el implante. Dependerá del criterio del profesional y la voluntad del paciente que se coloquen los implantes de una forma u otra.
La técnica de una única fase quirúrgica minimiza el trauma, ayuda a contornear los tejidos blandos y a conservarlos potencialmente.
Éxito de la implantología moderna
Actualmente, los implantes dentales son un tratamiento de primera elección en muchas situaciones clínicas ya que ofrecen unos resultados muy satisfactorios. Para pacientes edéntulos, pueden suponer un cambio en su calidad de vida ya que hay una gran mejora tanto en términos estéticos como en la función masticatoria.
La implantología es indudablemente una terapia exitosa que tiene, según la bibliografía, una tasa de éxito del 95%, con unos rangos de entre el 85 y 97%. Con los avances en cirugía y en la tecnología, cada vez nos acercamos más a una implantología más predecible. Aún y así existe un margen de error donde se incluyen riesgos generales, estéticos o biomecánicos cuando se coloca la prótesis sobre el implante y las periimplantitis que frecuentemente condicionan el futuro de la colocación de un implante. La tasa de éxito de la implantología es muy alta, cercana al 100 % pero hay que tener en cuenta que un implante está sujeto a diferentes agresiones y puede fracasar.
ás perfecto posible.
El uso de implantes dentales para reemplazar dientes faltantes ha crecido mucho durante las últimas tres décadas. Estudios clínicos demuestran resultados excelentes pero existe siempre un factor de riesgo en todos los procedimientos clínicos. A pesar de un buen planeamiento del tratamiento, existen complicaciones quirúrgicas.
Para prevenir estas complicaciones e intentar disminuir al máximo la probabilidad de que aparezca una, es necesario un buen planeamiento prequirúrgico, una cantidad y cualidad adecuada de hueso disponible, una técnica quirúrgica bien ejecutada, un periodo de recuperación postquirúrgico suficiente e instrucciones detalladas para el postoperatorio. Existen pacientes con condiciones predisponentes a sufrir algún tipo de complicación durante el tratamiento. El odontólogo deberá considerar diferentes criterios para recomendar al paciente adecuadamente sobre el tratamiento. Las consideraciones clínicas a tener en cuenta son la cualidad y cantidad de hueso disponible, salud general y oral del paciente y sus hábitos orales. Enfermedades sistémicas o autoinmunes pueden tener un impacto negativo en el pronóstico de la colocación de implantes.
Es la obligación del profesional dar unos resultados al paciente así que es indispensable conocer las posibles complicaciones en implantología. Estas complicaciones se van a dar en condiciones distintas y en cualquier fase del tratamiento. Las dividiremos en función de la fase quirúrgica, las inmediatas, las mediatas y las tardías.
Mala orientación del implante
Son aquellas complicaciones que aparecen durante la cirugía. Una de las primeras complicaciones que podemos encontrar es la mala orientación del implante. No es infrecuente encontrarse con este tipo de complicaciones pero son de fácil solución. En caso de duda, con una simple radiografía se puede verificar si el implante está bien colocado o se encuentra demasiado cerca de las raíces de los dientes contiguos u alguna zona anatómicamente comprometida. En caso de haber colocado un implante orientado erróneamente, es mejor buscarle una nueva ubicación que intentar adaptar la prótesis ya que acabaría fracasando no a muy largo plazo.
Errores en la incisión
Otra de las complicaciones serían los errores en la incisión. Para simplificar el trabajo del odontólogo es indispensable unas incisiones bien realizadas, con descargas en las zonas necesarias. Hoy en día, con las técnicas modernas mínimamente invasivas se coloca el implante haciendo una incisión que se limita exclusivamente al diámetro del implante.
Perforación de la cortical mandibular, tabla interna o externa
Es frecuente perforar la cortical y que no de ningún tipo de sintomatología. Así que es importante verificar siempre que el lecho implantario se encuentre en la zona deseada. Se puede usar una sonda de punta roma o un medidor de profundidad palpando con la otra mano en la zona lingual y vestibular para asegurarnos de que no se ha perforado la cortical mandibular. Una perforación de la cortical que no tiene ningún tipo de sintomatología puede pasar desapercibida durante mucho tiempo.
Penetración en el seno maxilar
Siempre y cuando se controle la penetración en el seno maxilar y estando en buenas condiciones de asepsia, no es una complicación grave. En el caso de romper la membrana des Schnaider no hay que suturarla ya que se regenera. Estadísticamente no hay diferencia de éxito entre los pacientes con perforación de membrana y los pacientes sin perforación.
Penetración en fosa nasal
Como en el caso de la penetración en el seno maxilar, no supone una complicación grave ya que no afecta a estructuras vitales. El sangrado es profuso ya que el suelo de la fosa nasal está altamente irrigado pero el mismo implante actuará de tapón parando la hemorragia. En el caso de que la altura ósea del maxilar no sea la ideal, es preferible buscar siempre el suelo de la fosa nasal para una anclaje bicortical. Radiológicamente puede parecer se haya penetrado en la fosa nasal pero en muy pocos casos se llega a perforar el suelo de la fosa.
Fenestraciones y dehiscencias
Cuando un paciente tiene las crestas finas y estrechas es frecuente ver, como a medida que se van pasando las fresas, se transparenta el instrumental rotatorio. Las dehiscencias aparecen a nivel de la plataforma del implante y las fenestraciones suelen aparecer en aquellos casos en los que ha existido un caso infeccioso con anterioridad o en casos donde se inclina demasiado la fresa para buscar el lugar idóneo para que emerja el cuello del implante. Para tratar estas complicaciones se estimula la formación de hueso y se impide la proliferación de tejido conjuntivo en la zona de cicatrización mediante injertos de hueso y colocación de membranas en caso que sea necesario.
Ausencia de sangrado del lecho
En hueso tipo I, al ser muy denso y corticalizado, puede haber ausencia de sangrado. En estos casos, no se colocará el implante y se dejarán pasar de dos a tres meses para ver si ha habido una neovascularización de la zona. Si a pesar de haber esperado, no existe sangrado, es recomendable no colocar el implante ya que puede fracasar no a muy largo plazo.
Hemorragias
Una de las complicaciones graves que pueden aparecer en los primeros días después de la colocación del implante puede ser la hemorragia del suelo de la boca por la perforación de la arteria sublingual durante la colocación del implante.
Parestesias
Si la colocación del implante ha sido en una zona próxima a la emergencia del nervio mentoniano, puede aparecer parestesia. La compresión, estiramiento o trauma del nervio pueden provocar una anestesia o parestesia reversible o irreversible.
Exposición de la cabeza del implante
Cuando se realiza la sutura a tensión o no se ha conseguido suturar herméticamente, la cabeza del implante puede quedar expuesta. En estos casos, se realiza una pequeña incisión en el periostio a nivel de las descargas de la incisión, para poder alargar el colgajo y poder cubrir toda la herida. Cuando queda la cabeza del implante expuesta, es esencial una buena higiene y revisiones periódicas. Si durante el periodo de osteointegración el implante queda expuesto, puede condicionar la pérdida temprana de hueso alrededor de los implantes.
Infección
La infección aparece como consecuencia de la colonización bacteriana de las espiras del implante y normalmente es consecuencia de una mala manipulación o la creación de un mal campo quirúrgico aséptico. Normalmente, la infección no aparece justo después de la colocación del implante ya que el protocolo antibiótico postquirúrgico cubre un amplio rango de gérmenes que podrían colonizar la zona periimplantaria.
Existe la posibilidad de la aparición de una periimplantitis retrógrada causada por la proximidad del implante a una infección periapical de un diente contiguo.
Dehiscencia de la herida
Puede pasar que los bordes de la herida, a pesar de haber sido suturados, se separen por alguna causa. En el caso de que la dehiscencia no sea muy grande y no hay gran exposición de hueso, se dejará y se esperará a que cicatrice por segunda intención indicándole al paciente la aplicación de geles con clorhexidina. En el caso de que sea más amplia, convendría suturar de nuevo la herida.
Cicatrización queloide
Aparecen cuando hay un aumento de sustancias llamadas “factor de crecimiento” durante el proceso de cicatrización. Hay una formación excesiva de tejido conjuntivo cuya finalidad es la de tapar la herida. En el caso de las cicatrices hipertróficas, la cicatriz es más gruesa y deforme.
Sinusitis
La sinusitis es una inflamación de la mucosa de los senos paranasales de origen bacteriano. Es una complicación que aparece raramente después de la colocación de implantes dentales. Suele aparecer en pacientes en los que se les haya realizado una elevación de seno utilizando injertos óseos. Se administra amoxicilina con ácido clavulánico como tratamiento.
Infección y abcesos
Debido al gran número de implantes dentales colocados, es una complicación cada vez más frecuente. Aparece a los meses de la colocación del implante una fístula adyacente al implante sin causa justificada. Es más frecuente en implantes postextracción ya que se puede haber reactivado algún foco infeccioso que se dejara sin tratar y que estuviera latente. Las causas pueden ser variadas, desde sobrecarga del implante o recalentamiento del hueso, presencia de infecciones preexistentes, permanencia de material endodóntico…
Fallo de integración del implante
Antes de la segunda cirugía o una vez cargada la prótesis, puede presentarse el fallo de integración del implante. Si aparece antes o durante la segunda cirugía, se puede reemplazar el implante utilizando el mismo lecho o creando uno de nuevo. Antes de confeccionar la prótesis hay que asegurarse de que el implante tiene una buena estabilidad y no tiene ningún tipo de movilidad.
Avulsión del implante en senos maxilares
En casos de implantes en hueso muy esponjoso y con escasa altura, puede ocurrir una avulsión del implante en el seno maxilar cuando se está roscando y se realiza una maniobra brusca. El paciente puede no presentar ninguna sintomatología y el tratamiento será su extracción a través de las vías nasales.
Pérdida temprana del hueso alrededor de los implantes
En pacientes que tienen crestas estrechas y el implante dental no está completamente reodeado por hueso de cómo mínimo un milímetro de grosor, puede haber pérdida temprana del hueso. El fracaso de los implantes comienza mayoritariamente por la pérdida de hueso crestal así que hay que intentar conservarlo. Por ejemplo, no hay que dudar en realizar rellenos óseos en todas las zonas donde las espiras del implante queden expuestas.
Fractura mandibular
La pérdida excesiva de hueso alrededor del implante puede conllevar una fractura mandibular, más frecuente en mandíbulas atróficas. Es aconsejable realizar estudios radiológicos periódicamente para valorar si la pérdida ósea es excesiva y así prevcenir una posible fractura mandibular.
Fractura de implantes
Este tipo de complicaciones aparecen como consecuencia de sobrecargas en los implantes dentales donde la proporción corona-implante no es proporcionada, cargas no axiales al eje del implante o por presencia de poros en el metal. Una de las causas más frecuentes es la pérdida de hueso alrededor del implante. Normalmente viene precedida por la fractura del tornillo de fijación de la prótesis. Un posible tratamiento sería retirar el trozo de implante que queda en el hueso valorando siempre el daño que se le puede hacer al hueso restante.
Fractura de prótesis y tornillos
Esta complicación es frecuente y son consecuencia de la fatiga del metal causada por el stress biomecánico. Para evitar este tipo de complicaciones, convendría cambiar los tornillos de fijación en las revisiones anuales. En el plan de tratamiento también se pueden incorporar métodos para disminuir el estrés y minimizar sus efectos a largo plazo. Normalmente, las fracturas del material protésico se deben a sobrecargas del mismo así que es importante que el ajuste oclusal sea lo más perfecto posible.